Marcos 9:23
Jesús le dijo: Si puedes creer, al que cree todo le es posible.
Génesis 25:22-23.
25:22 Y los hijos luchaban dentro de ella; y dijo: Si es así, ¿para qué vivo yo? Y fue a consultar a Jehová; 25:23 y le respondió Jehová: Dos naciones hay en tu seno, Y dos pueblos serán divididos desde tus entrañas; El un pueblo será más fuerte que el otro pueblo, Y el mayor servirá al menor.
Lo segundo que Dios nos enseña para tener una familia ejemplar es:
2. Familias que crean que sus hijos son una bendición.
En este relato la esposa de Isaac tenía un problema en medio de su embarazo, ya que sus hijos se peleaban sin antes nacer adentro de ella y eso le estaba generando incomodidad. Esta madre llamada Rebeca por un momento de fuerte presión llego a pensar que era mejor era no seguir viviendo. La pregunta es: ¿Cómo esta mujer después de desear tener hijo, ahora que los tenía pensaba algo tan negativo? Tener hijos nunca será fácil para ninguna familia, pero cada padre y madre tendrá que tomar una decisión y es que deben pensar que sus hijos son una bendición sin importar las presiones que puedan estar viviendo como familia. Hay personas que están viviendo procesos difíciles con algunos de sus hijos y eso los está desanimando o los está haciendo pensar cosas incorrectas de sus hijos. Pero una de las cosas que Dios quiere es que cada padre y madre siempre piense que sus hijos son una bendición sin importar como estén sus vidas actualmente.
Salmos 127: 3.
3 “He aquí, herencia de Jehová son los hijos;
Génesis 25:27-28.
25:27 Y crecieron los niños, y Esaú fue diestro en la caza, hombre del campo; pero Jacob era varón quieto, que habitaba en tiendas. 25:28 Y amó Isaac a Esaú, porque comía de su caza; mas Rebeca amaba a Jacob.
Lo tercero que Dios nos enseña para tener una familia ejemplar es:
3. Familias que eduquen adecuadamente a sus hijos.
La educación más importante que recibirán los hijos no se encuentra en las aulas de clase en preescolar, primaria, secundaria y en la universidad. La educación más importante que reciben los hijos en los hogares, ya que allí es donde se forman las actitudes, el carácter y la manera como se van a conducir las personas. En la universidad te forman para ser un profesional en un área laboral pero en el hogar los hijos son formados en el tipo de persona que será. Cuando hablo del tipo de persona que será, me refiero a si ese hijo será integro, honesto, bondadoso, amistoso, cariñoso, respetuoso, amable, etc. Un ejemplo de ello es que una persona puede ser licenciada en administración pero esa misma persona podría ser un profesional honesto o tramposo dependiendo en gran parte de la formación que recibió esa persona en su hogar. Hoy en día vemos a muchos padres solo enfocados en la educación académica y se están olvidado de la educación espiritual y moral que es la más importante. Cuando los padres dejan de ensenarles a sus hijos que Dios es lo más importante comienzan los problemas a multiplicarse y afectar a toda la familia. Donde más deberíamos como padres esforzarnos es en enseñar a nuestros hijos es ama a Dios por encima de todas las cosas.
Deuteronomio 6: 5-9
5 Y amarás a Jehová tú Dios de todo tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas. 6 Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; 7 y las repetirás a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al acostarte, y cuando te levantes. 8 Y las atarás como una señal en tu mano, y estarán como frontales entre tus ojos; 9 y las escribirás en los postes de tu casa, y en tus puertas.
Génesis 25:38-41.
38 Y Esaú respondió a su padre: ¿No tienes más que una sola bendición, padre mío? Bendíceme también a mí, padre mío. Y alzó Esaú su voz, y lloró. 39 Entonces Isaac su padre habló y le dijo: He aquí, será tu habitación en grosuras de la tierra, Y del rocío de los cielos de arriba; 40 Y por tu espada vivirás, y a tu hermano servirás; Y sucederá cuando te fortalezcas, Que descargarás su yugo de tu cerviz. 41 Y aborreció Esaú a Jacob por la bendición con que su padre le había bendecido, y dijo en su corazón: Llegarán los días del luto de mi padre, y yo mataré a mi hermano Jacob.
Lo cuarto que Dios nos enseña para tener una familia ejemplar es:
4. Familias comprensivas y motivadoras.
Este hijo llamado Esaú cometido algunos errores importantes en su juventud que le costaron cosas transcendentales como la primogenitura que era muy significativo en ese tiempo. Como padres debemos entender que los hijos se van a equivocar muchas veces, y a lo mejor se van a equivocar en cosas que a ti como padre y madre no te van a gustar, como por ejemplo salir embarazada antes de casarse, dejar los estudios sin graduarse de secundaria, etc. La pregunta es: ¿Cómo reaccionas como padre o madre antes los errores de tus hijos? Reaccionas con palabras como: Eso te pasó por desobediente, yo sabía que eso te iba mal por rebelde, asume tus consecuencias tú solo. En esta historia el padre llamado Isaac le dijo algunas cosas a su hijo Esaú que no le cayeron nada bien, más bien generaron desmotivación, rencor y odio hacia su hermano. Tal vez este papa tenía que ir más allá de solo decir la verdad o decir lo correcto, o lo que debió hacer el hijo para no equivocarse. Como padres se debe aprender a ver más allá del error y la consecuencia, en esos momentos es donde se debe ver como se debe sentir el hijo en ese momento donde salió perdiendo. A lo mejor ese hijo si su padre le hubiese dicho: Hijo no importa los errores que cometiste todavía te amo, o tal vez le hubiese dicho: Hijo no te preocupes por lo perdiste, Dios todavía tiene grandes cosas contigo, o tal vez si le hubiese expresado: Hijo cuenta conmigo a pesar de tus errores, juntos saldremos de esta. La reflexión de esta historia es que la reacción de los padres en esos momentos de dificultad para los hijos es clave para que sus hijos reaccionen ante sus errores de manera correcta.